La reciente encuesta de la casa Massive Caller que posiciona al alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha, como el político con mayores posibilidades de ser el próximo gobernador de Yucatán alentó a los partidos satélites a buscar alianzas en la búsqueda de una fórmula que permita alcanzar y superar a la aplanadora panista.
Como informamos el miércoles, si las elecciones a la gubernatura de Yucatán fueran hoy, Renán Barrera ganaría los comicios sin necesidad de alianzas, por cinco puntos porcentuales sobre el candidato (a) que postule el partido Morena, el más cercano competidor de acuerdo con la más reciente encuesta de la firma Massive Caller.
Ese análisis arroja que si Morena postula a Joaquín Jesús Díaz Mena, el panista ganaría con el 36.9 por ciento de la votación y el candidato guinda se quedaría con el 31.7%, pero si postula a Verónica Nohemí Camino Farjat, la ventaja se amplía: el alcalde meridiano tendría el 39.1% contra 25.4% de la tizimileña.
Con base en esos números, el PRI busca concretar con el equipo de campaña de Barrera Concha la conformación de un “Gobierno de Coalición”, ya que ese instituto apenas goza de un 5.5% de las preferencias electorales a nivel local, pero uno de sus cuadros, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín, quien en lo personal tiene una tasa del 9.1%, sostiene que puede solo.
El problema es que, bajo la mesa, altos directivos priistas, incluso sus expresidentes Mauricio Sahuí Rivero, Francisco Torres Rivas y Carlos Pavón Flores, tienen un pie en Morena.
Y de los demás partidos que serían las rémoras, la directiva local del PRD también mantiene pláticas con Morena, el PT está con el partido guinda, el PVEM está a nivel nacional con el partido en el poder pero a nivel local no quiere perder sus privilegios de andar de la mano con el gobierno de Mauricio Vila Dosal, al igual que Nueva Alianza.
Barrera Concha, en su figura institucional, no se ha acostado en su hamaca y mantiene una estrecha comunicación con los electores del interior del Estado: ayer acudió como invitado del informe de gobierno del ayuntamiento de Ticul, y esta noche tiene programado asistir al informe del ayuntamiento de Izamal, cuyo alcalde, por cierto, forma parte del grupo de Ramírez Marín.
Mientras se concretan las alianzas bajo la mesa, los analistas toman en cuenta un dato importante: la población indecisa que oscila entre el 12 y 15 por ciento de acuerdo con Massive Caller, y la cual será definitoria para inclinar la balanza.